Leer León. Sensaciones
La primera impresión fue penosa y me vino de manos de la web donde no fui capaz de encontrar ni los horarios de la Feria ni un calendario ordenado de actividades ni una información viva y actualizada y, si uno tiene que desplazarse más de 300 kilómetros la información a través de internet se puede convertir en la primera puerta de entrada y, con ello, en el primer impacto positivo o negativo.
En función del presupuesto que se maneja, aproximadamente seis veces el que dedica el Ministerio todo el año para el apoyo de la dimensión cultural de las librerías, esperábamos, también y así lo escribíamos, logros en consonancia con ello.
La primera sensación a mi llegada, es cierto que no era ni por mucho la mejor hora, fue, casi, patética por su estado de vacío. No había prácticamente nadie a las 14:00. TAmpoco había mucha más gente a las 17:00
Es cierto que, posteriormente, a esos de los 18:00 el ambiente se empezó a calentar un poco más, pero sin llegar a llenos espectaculares. Tuve tiempo para hablar con políticos, personas de la organización, empresas de servicios, libreros, editores.... un abanico de parte de los interesados. Cierto que no hablé con los lectores, pero es que no había muchos cuando yo estuve.
Estas son algunas de las conclusiones y comentarios fruto de la observación y la charla planteados con ánimo constructivo y sin especificar por quién o por qué fueron dichos no vaya a ser que a alguien le "tiren de las orejas".
1. Quizás la más importante. Francisco Jarauta en el Congreso que se celebró recientemente en Cáceres , en cuya web, por cierto. no figuran todavía ninguna ponencia ni conclusiones y ya ha pasado un mes, señalaba que la lectura está o debe estar en las agendas de todos los gobiernos y en las mesas de discusión. Cuando alguien se acerca a una Feria que se define como Internacional y se centra en el libro infantil y juvenil, es decir, en los futuros lectores y en un segmeneto de mercado en crecimiento pensaba que iba a poder encontrar parte de ese halo de la importancia política en la muestra y lo que tristemente parece aflorar es que la poca visión política de los políticos la convierte en un espacio sin visión y campo propio o bien para el lucimiento o bien para la crítica sin excesivo fondo. Igual se debería haber mirado más a Madrid y haber tomado nota del modélico traspaso en la Dirección General del Libro con el cambio de Gobierno. Una Feria de esta dimensión, si realmente quiere llegar a ser acicate y referente sólo se puede hacer desde el consenso político, político y sectorial y político y ciudadano. Nada de esto parece que ha habido.
2. Las apuestas de calado requieren tiempo y hace dos meses todo el montaje estaba muy verde. Hay promesas de que el año que viene ha empezado prácticamente ya para poder hacerlo con tiempo.
3. De la web ya hemos hablado, pero es curioso el casi nulo tratamiento o presencia que tienen las Tic en el espacio. Es más los ordenadores que había, creo que tres o cuatro, estaban apagados cuando pasamos delante de ellos. Hay que ver si el acento, y esta sería ya una reflexión para el año que viene, la ponemos en Leer o en Libro y aún con todo podríamos plantearla desde la línea que Millán señaló muy acertadamente en Galicia ya hace unos meses: Me quedo con una frase: "Los libros son los envoltorios de papel en los que llegan los libros a nosostros. llevan bitios dentro".
4. El Espacio: Un pabellón continuo y no dos. El espacio de la cafetería debería ser aprovechado para unir los dos pabellones y pensar luego, posteriormente su sentido interno de circulación. Quizás habría que separar infantil y juvenil, quizás habría que reflexionar sobre los soportes....el proyecto lo debería marcar.
5. Si observamos el programa da la sensación de que no hay proyecto. No hay ningún enmarque a lo que allí pasa, a lo que se quiere provocar. Vemos exclusivamente un repertorio de actividades sin ningún elemento de unión entre las mismas mas que el tipo (conferencias, artes escénicas, talleres, exposiciones.....) lo cual impide o dificulta dos posibilidades por lo menos: organizarme un día, ya que en ningún sitio se recoge la actividad que hay a lo largo del día, o saber, realmente, en qué ejes de interés se está pretendiendo centrar la atención.
6. El mobiliario pensado para la librería no era el adecuado. Tampoco lo ha sido la catalogación de los fondos, por editoriales; pero difícil hacer algo distinto cuando los libros han llegado, prácticamente, con 48 horas de antelación.
7. Imagen gráfica dispersa. Demasiados modelos de cartel (3 por lo menos), tratamiento del logo poco claro......
8. Feria como contenedor, coherente con la falta de proyecto. Nos comentaban que más que dinero para proyecto, las instituciones se han dedicado a reciclar y reutilizar exposiciones que lo mismo podían haber estado esas que otras. Vimos, por ejemplo, en detalle las exposiciones del propio espacio Ferial, tratadas y señalizadas con cierta rapidez y poco cariño y más pausadamente la de "una ventana al mundo" por la que a lo largo de una semana habían pasado aproximadamente 420 personas. Estuvimos, de hecho, viéndola solos.
9. No tiene sentido que convivan dos Ferias. Las casetas de los libreros sobraban, por lo menos, en ese marco. Igualmente, hay que dar una vuelta a los horarios.
10. Es imperdonable que algunas Instituciones o Asociaciones que han sido invitadas no hayan hecho acto de presencia, quizás, desde una postura cómoda y poco arriesgada.
11. Lo segundo más importante o, quizás, lo primero. Cuando se tiene ganas de mejorar y no hay una posición de autosuficiencia, que en cambio aparece en otras instituciones del sector que oyen y no escuchan, todo puede cambiar, aunque el inicio, quizás no ha sido el mejor. Nadie me preguntó, aunque lo comentamos, qué era lo que estaba bien. Al revés, las personas más directamente implicadas que lo son todos querían saber qué era lo que nos parecía (empleo el plural porque íbamos más de una persona) que estaba mal con una clara idea de afán de mejora.
Esta es mi primera contribución a ello. Esperemos que sigan con los oidos igual de abiertos y que no se cierren cuando la Feria baje el telón el domingo, aunque ese día alguien podrá descansar un poco más y vivir con más tranquilidad.
1 comentario
Javier celaya -
Javier Celaya